Languidecer, ¿el inicio de la depresión?
El 13 de enero fue el día mundial de la lucha contra la Depresión, seguramente lo escuchaste o lo viste en algún lugar, pero, ¿te paraste a pensar realmente que significa?.
Seguramente si no tienes esta enfermedad o a alguien cercano que la padezca, pensarás que no te va a suceder.
Hay casos en donde esta enfermedad es muy obvia y determinante que quién lo padece necesita ser atendido por un médico especialista -si, pensaste bien, un Psiquiatra- en dónde le recetan medicamento para nivelar su química cerebral, esto no depende de la voluntad de la persona, ni de cuántas ganas le eche a la vida o que disposición tenga, sencillamente hay que nivelar la química cerebral, a veces es por un tiempo determinado y otras por largas temporadas, esto no se da de un día para otro, se va gestando, por lo general, con el paso del tiempo, porque nos desatendemos y/o le restamos importancia.
Hay otros casos en donde estamos deprimidos, nos sentimos mal, y con ir a terapia, cuando tenemos o estamos pasando una crisis específica, ¡listo! Salimos adelante pasando ese momento difícil, es decir nos atendimos a tiempo.
Pero, que pasa cuando no identificamos cómo nos sentimos, ¿ni cómo estamos? ¿Y vamos cayendo poco a poco en un estado llamado “languidecimiento”?.
Ahí la cosa se complica, pues considero que justo hoy ésta pandemia nos ha afectado a todos de muchas maneras y en diferentes niveles, pero hay una condición que se ha hecho especialmente notoria tras largos meses de restricciones y confinamiento. Las personas se sienten sin energía, faltas de creatividad y con dificultades para concentrarse. ¿Se trata de un simple bache de desmotivación o son víctimas de la languidez?, estamos muchos en esta posición, minimizando lo que vivimos en la pandemia, creyendo que estamos bien o ya sea porque nos gana la necesidad y la urgencia del día a día, ya sea porque tenemos que trabajar, o niños que atender o familia que apoyar.
¿Es muy importante que te tomes un tiempo e identifiques cómo te sientes y te hago algunas preguntas, tienes algunas de éstas? ¿Te parecen familiares?
1.Sensación de estancamiento.
2. Sentimiento de vacío.
3. Desesperación y frustración de bajo nivel.
4. Apatía.
5. Sensación de inquietud.
6. Sensación de no estar tan presente en lo cotidiano.
7. Abandono de actividades que antes disfrutabas, ¡y todavía hay más!
Este término” langidez” resurgió a raíz de la pandemia con connotaciones psicológicas y vale la pena prestarle atención.
Te doy algunas recomendaciones que te pueden ayudar a salir de este estado, ya que si no le prestamos atención a largo plazo se puede convertir en depresión.
–No te rindas ni des por vencido
– Socializa con gente que te sientas bien, te sume y te inspire
– Haz tiempo para ti
– Aprende algo nuevo
– Desarrolla una habilidad nueva
– Ve a terapia
– Has trabajo personal
Laura Albarrán
Fundadora Selilac, se he especializado en estudiar y practicar desde hace más de 30 años los pilares del bienestar como son las terapias y la meditación. Selilac es una empresa que labora día a día en brindar bienestar a las personas por medio de cursos, prácticas de valor y terapias, para reducir el estrés en la vida personal y logren tener un una mayor consciencia de quienes son como seres multidimensionales y cómo afectamos a nuestro alrededor.
